"Por supuesto que existe la posibilidad de que quienes votaron en contra del nuevo acuerdo podrían formar un partido aparte, porque representan un sector importante de la población, es decir, un tercio de los votantes de Syriza, lo que vendría siendo un 10% de la población", dijo el experto a Sputnik.
"Cerca del 76% del Parlamento votó a favor del acuerdo, pero esto es solo un factor", cree Fanaras.
El otro, continúa "es que existe la enorme división dentro de Syriza hace que el partido esté muy inestable (así que) habrá que ver si la mayoría parlamentaria puede mantener este acuerdo".
La mayoría de los otros partidos están en una profunda crisis, dijo el experto, "por ejemplo, Nueva Democracia, el segundo partido después de Syriza, no tiene un líder por el momento, por lo que no existe nadie que pueda amenazar la posición de Syriza o Tsipras".
No se puede decir que Tsipras esté perdiendo demasiado apoyo de la ciudadanía, añade, "ya que según encuestas recientes un gran porcentaje de los griegos entiende que Tsipras se vio obligado a otorgar un compromiso a nuestros socios europeos, en lugar de tomar una decisión radical y abandonar la zona euro".