10 de noviembre 2014, 03:54 GMT
Las restricciones casi similares a las que actualmente afectan a los anuncios del alcohol vetarían a refrescos, dulces, chips de patata, margarina y algunos embutidos.
Según el diario, el objetivo principal de los autores de correspondientes enmiendas a la ley de publicidad es "mejorar la cultura alimentaria entre los jóvenes para evitar obesidad e hipertensión arterial".
Uno de los promotores de la medida es Vasili Shestakov, diputado del partido oficialista Rusia Unida y coautor con el presidente ruso, Vladímir Putin, de varios libros sobre judo.
El veto podría causar serios problemas para el ya de por si precario mercado de publicidad en los medios rusos que en los primeros cuatro meses ha caído un 17% en comparación con el mismo período de 2014.
Los clientes gastaron el año pasado unos 22.000 millones de rublos (500 millones de dólares) en las campañas publicitarias de los productos más afectados por las restricciones.