Hernández, condenado por un tribunal estadounidense a dos cadenas perpetuas, regresó a Cuba en 2014, tras pasar 16 años en prisión.
“Siento una admiración muy grande hacia el pueblo soviético en aquellos años, el pueblo ruso, de su historia de lucha, su historia de sacrificio; no podemos olvidar cuánto aportaron a la humanidad por su valentía y gran sacrificio”, dijo.
Además, Hernández recordó que en Rusia hubo grupos de solidaridad con él y otros cuatro miembros de "los Cinco cubanos" que estuvieron prisioneros en EEUU bajo supuestos cargos de espionaje y conspiración.
Hernández afirmó que la solidaridad que recibieron los cubanos de la gente de diversos lugares del mundo les ayudó a resistir en la prisión.
“Nosotros nos inspiramos mucho en el saber que habían personas allá afuera, luchando por nosotros; hubo gestos hermosísimos de solidaridad, y yo estoy convencido que fueron todos esos esfuerzos, la unión de cada uno de esos esfuerzos, lo que finalmente nos liberó”, dijo.