Hernández, condenado por el tribunal norteamericano a dos cadenas perpetuas, regresó a Cuba en 2014, tras pasar 16 años en prisión.
“No nos hemos apartado ni un milímetro de nuestros principios para llevar a cabo este proceso; estamos conversando sobre la base de los mismos principios que hemos estado planteando por más de medio siglo", afirma.
Añadió que La Habana está dispuesta a conversar con Washington siempre y cuando sea sobre la base de respeto a la soberanía e independencia cubana.
“Lo más normal del mundo es que dos vecinos se lleven bien (…) lo anormal son los actos de agresión, de presión y de todo tipo de amenazas, de que los cubanos hemos sido objeto”, afirmó.
En diciembre del 2014, Barack Obama y Raúl Castro anunciaron los planes para normalizar las relaciones entre los dos países. Washington cerró su legación en la isla en 1961 tras la ruptura de lazos diplomáticos.
El 1 de julio EEUU y Cuba anunciaron oficialmente la reapertura de embajadas en Washington y La Habana.