Según aseguró el ministro ruso de Deporte, Vitali Mutkó, la reducción de gastos no afectará la construcción de los estadios.
"Hemos tomado la decisión fundamental de mantener el costo de los estadios", dijo a la agencia R-Sport.
El director general de la representación de la FIFA en Rusia para la organización de la Copa Mundial de 2018, Dmitri Efímov, aseguró que la organización internacional no está alarmada por la reducción de los gastos.
"La FIFA está al corriente y el decreto no le causa ninguna preocupación", señaló a R-Sport.
El servicio de prensa de la FIFA confirmó que "la revisión del presupuesto no influirá en la entrega de las principales instalaciones necesarias para celebrar con éxito la Copa Confederaciones de 2017 y la Copa Mundial de 2018".
El torneo se disputará en territorio ruso por primera vez en la historia entre el 14 de junio y el 15 de julio de 2018.