Lamentó que la crisis en Ucrania “abrió una nueva herida en el corazón de Europa, la herida de inestabilidad”.
“Es un signo muy malo para las relaciones internacionales, porque en vez de la prosperidad y la cooperación económica en la región se observan los procesos que conducen a una guerra, militarización e imposición de las sanciones”, dijo.
El jefe del gabinete griego añadió que las iniciativas diplomáticas al respecto, precisamente las que contribuyen a la implementación de los acuerdos de Minsk para el arreglo de la crisis en Ucrania, “merecen atención y apoyo”.
Afirmó además que Europa ya no es el centro económico del mundo.
“En Europa durante mucho tiempo tuvimos una ilusión al considerar a nosotros mismos un centro del mundo (…) sin embargo, el centro económico del mundo ya se ha desplazado, surgen nuevas fuerzas que juegan el papel cada vez más importante a nivel económico y geopolítico”, dijo al intervenir este viernes en la sesión plenaria del Foro Económico de San Petersburgo.
Añadió que las relaciones internacionales adquieren cada vez más un carácter multipolar.
“La Unión Euroasiática (de Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Rusia y en un futuro, Kirguistán) es una nueva forma de la integración regional y representa un ejemplo potencial de las nuevas fuentes de riqueza, bienes y fuerza económica”, dijo.