El jurado ha destacado que su obra es “una soberbia aventura del diálogo y la libertad”.
Según el acta, que ha leído el presidente del jurado, el director de la Real Academia Española (RAE), Darío Villanueva, Padura es un escritor “arraigado en su tradición y decididamente contemporáneo; un indagador de lo culto y lo popular; un intelectual independiente, de firme temperamento ético”.
La amplia obra del Padura, que tiene también la nacionalidad española desde 2011, recorre “todos los géneros de la prosa” y destaca, según el acta, un recurso que “caracteriza su voluntad literaria como es el interés por escuchar las voces populares y las historias perdidas de los otros”.
“Desde la ficción, Padura muestra los desafíos y los límites en la búsqueda de la verdad. Una impecable exploración de la historia y sus modos de contarla», remata el acta.
Padura, nacido en La Habana en 1955, está considerado como uno de los novelistas más prometedores e internacionales de la lengua castellana.
Novelista y periodista cubano, es conocido especialmente por su serie de novelas policiacas protagonizadas por el detective Mario Conde.
Mario Conde es “la manera que yo he tenido de interpretar y reflejar la realidad cubana”, afirma Padura, en la nota de prensa hecha pública por la Fundación Princesa de Asturias.
Con su novela El hombre que amaba a los perros (2009), basada en la historia de Ramón Mercader, asesino de León Trotsky, “alcanzó un indudable éxito internacional”, señala la nota.
En 2012, Padura recibió el Premio Nacional de Literatura de Cuba.
Entre los 27 aspirantes al galardón cohabitabn todos los géneros literarios, así como diferentes idiomas y nacionalidades.
De todos ellos destacaba, además de Padura, el poeta sirio Adonis, el novelista japonés Haruki Murakami, el norteamericano James Salter y el británico Ian McEwan.
Los tres últimos ganadores del Princesa de Asturias de las Letras fueron el irlandés John Banville (2014), el español Antonio Muñoz Molina (2013) y el estadounidense Philip Roth (2012).
Creados en 1981, cada uno de los Premios Princesa de Asturias está dotado con una escultura de Joan Miró, la cantidad en metálico de 50.000 euros, un diploma y una insignia.