La misma había sido presentada por los senadores del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSBD), Aloysio Nunes Ferreira y José Serra, como "un homenaje a las víctimas que reconoce la contribución a la formación económica, social y cultural de Brasil de miles de brasileños descendientes de refugiados".
Como explicó Itamaraty este martes, un día antes de la votación en el Senado, el embajador turco fue recibido por el Secretario General de Relaciones Exteriores de Brasil, Sergio Danese, quien "concedió amplias explicaciones sobre los procedimientos votados en el Senado" y sobre "el sentido del requerimiento y la tradicional posición de Brasil en la materia, que sigue inalterada".
Además la nota acusó a "la influencia del lobby armenio" en Brasil y consideró la aprobación del requerimiento nº 550 como "una irresponsabilidad".
De esta manera, Brasil se une al Vaticano en la lista de países que sufren represalias diplomaticas de Turquía en lo que va de 2015, ya que el pasado mes de abril un discurso del Papa Francisco, en el que empleó la expresión "genocidio armenio", causó la inmediata llamada a consultas de embajador turco en la Santa Sede.
En Latinoamérica solo Argentina y Uruguay reconocen oficialmente el genocidio armenio que costó la vida de 1,5 millones de armenios a manos del Imperio Otomano entre 1915 y 1917, una condena compartida por el Parlamento Europeo, Francia, Suiza y Rusia.