"Irán examina varias opciones para suministrar gas a Europa, son posibles cinco o seis rutas: una a través de Turquía, otra, por el mar Negro, también es posible transportar el gas por Irak, Siria o el Mediterráneo", dijo Ramezani a esta agencia en los pasillos del Congreso Internacional del Gas que se celebra estos días en París.
Ya se está estudiando cuál de las rutas es la más adecuada, sin embargo, la decisión correspondiente se tomará solo cuando se levanten las sanciones y los clientes europeos puedan firmar contratos gasísticos con Teherán, señaló.
Según Ramezani, "es posible" que en un futuro el gas iraní pase por el gasoducto ruso-turco Turk Stream, sin embargo señaló que "el asunto no se ha discutido todavía".
"A lo mejor hay que comenzar las negociaciones ya que el punto donde el gasoducto ruso-turco llegará a la UE también puede convertirse en un nexo con un gasoducto iraní", dijo.
Ramezani destacó la colaboración que su empresa tiene con la rusa Gazprom y recordó que el año pasado las compañías firmaron un memorando encaminado a fortalecer la cooperación en diversos ámbitos.
El levantamiento de las sanciones a Irán depende de los resultados de las negociaciones con el Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, el Reino Unido, Rusia más Alemania) sobre el programa nuclear del país persa, que deben culminar para el 30 de junio con un acuerdo final.