La casa está situada en una región central de Brasilia de fácil acceso y concentra una comisaría de policía especializada, un juzgado, una Defensoría Pública y un gabinete de apoyo psicosocial, y permanecerá abierta 24 horas al día, los siete días de la semana.
El principal objetivo es facilitar al máximo las denuncias para evitar que las mujeres víctimas de la violencia desistan de denunciar por la burocracia o por la dispersión de los trámites.
Casa da Mulher Brasileira será inaugurada em Brasília (DF), terça-feira (02/06), às 14h. https://t.co/tEpUrnU0jv via @YouTube
— SPolíticas Mulheres (@SPMulheres) 29 мая 2015
La Casa de la Mujer de Brasilia es la segunda unidad de este tipo inaugurada en Brasil, después de la de Campo Grande, en el estado de Mato Grosso do Sul, donde desde el mes de febrero ya se ha atendido a más de 9.000 mujeres, según datos de la Secretaría de Políticas para Mujeres de la Presidencia (SPM).
"La violencia contra la mujer es una violencia primaria, básica, que si no se combate se transforma en un ejemplo deplorable para niños, jóvenes y para el futuro del país", ha resaltado Rousseff, al tiempo que ha lamentado que entre 2009 y 2011 una media de 15 mujeres fueron asesinadas cada día en Brasil.
El proyecto de la expansión de las "Casas de la Mujer Brasileña" es la principal iniciativa de combate a la violencia de género desde 2006, cuando se aprobó la conocida popularmente como "Ley Maria da Penha", que endureció las penas para los agresores e incorporó por primera vez medidas como órdenes de alejamiento.
El nombre de la ley es un homenaje a Maria da Penha Maia Fernandes, que fue maltratada durante sus 23 años de matrimonio e incluso sufrió dos intentos de asesinato; por arma de fuego –lo que la dejó parapléjica—y por electrocución y ahogamiento.
Después de la última tentativa de homicidio Maria da Penha denunció a su marido, que sólo fue condenado después de 19 años de juicios y que finalmente solo pasó dos años en la cárcel; la indignación de la víctima y de los colectivos en defensa de las mujeres forzaron la aprobación de la ley.