"El Comité organizador del Mundial 2018 en Rusia en su labor se rige por los principios de máxima transparencia, su lealtad a los ideales del fútbol y el espíritu de juego limpio", dice el comunicado.
El organismo ha subrayado que la campaña rusa para acoger el Mundial se realizó "de completo acuerdo con las normas éticas y las reglas de la FIFA".
"Rusia acogerá el Mundial 2018 por haber presentado la concepción más original y atractiva para organizar el torneo, eleborada en el marco del proceso de entrega de la solicitud", ha señalado.
El portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Alexandr Lukashévich, a su vez ha comentado que la detención de los representantes de la FIFA es un nuevo caso de aplicación extraterritorial y arbitraria de las leyes estadounidenses.
"Sin adentrarnos en los detalles de las acusaciones, llamamos la atención sobre el hecho de que se trata de un nuevo caso de aplicación extraterritorial e ilegal de la legislación de EEUU, esperamos que el mismo no sea utilizado de ningún modo para empañar la imagen de la organización futbolista internacional en general y sus decisiones, incluidas las relacionadas con recursos humanos", ha subrayado Lukavévich en un comunicado.
Estos presuntos crímenes se llevaron a cabo a través de una alianza con ejecutivos deportivos que otorgaron contratos lucrativos a cambio de millonarios sobornos.
Se calcula que los acusados recibieron más de 150 millones de dólares en sobornos a cambio de brindar apoyo oficial.
La mayoría de este apoyo se reflejó en la comercialización de derechos de difusión y marketing con varios torneos, incluyendo los clasificatorios para el mundial en la región CONCACAF, la Copa América Centenario, la Copa Libertadores y la Copa do Brasil, entre otros.