Según el informe, durante el encuentro que tuvo lugar "sin la presencia de las autoridades ucranianas" en un hospital militar de Kiev, los dos rusos afirmaron que "eran miembros de una unidad de las Fuerzas Armadas de Rusia”.
Declararon que “realizaban una misión de reconocimiento” e “iban armados, pero que no tenían orden de atacar”.
“Uno de los detenidos dijo que 'recibió una orden de su unidad para ir a Ucrania’; ambos arrestados mencionaron que habían estado en Ucrania antes 'realizando misiones'”, según relata el informe de la OSCE.
Anteriormente, Kiev hizo publico el 16 de mayo que detuvo en Donbás a dos militares rusos.
También la esposa de uno de los detenidos, Ekaterina Alexandrova, afirmó que su marido prestó servicio antes como sargento pero que se retiró del Ejército en diciembre del año pasado.
El padre del otro detenido, Vladímir Yeroféev, confirmó que su hijo se dio de baja en el Ejército ruso a principios del año en curso aunque no pudo indicar por qué.
Las autoridades de la autoproclamada República Popular de Lugansk (RPL) explicaron que Yeroféev y Alexandrov combatían en las filas milicianas y fueron capturados tras resultar heridos.
Además, el líder de la RPL, Ígor Plotnitski, afirmó que los dos sufrieron torturas a manos de los agentes de seguridad ucranianos.
La Embajada de Rusia en Kiev demandó que se autorizara un encuentro de sus empleados con los detenidos para prestarles la ayuda necesaria, pero aún no ha recibido una respuesta al respecto de las autoridades ucranianas.