"Estamos enterrados de mensajes y los estamos investigando", dijo a los periodistas un portavoz del Foreign Office.
Tres colegialas de Londres, Shamima Begum, de 15 años, Amira Abase, de 15, y Kadiza Sultana, de 16, volaron a Estambul el 17 de febrero para dirigirse a una zona de Siria controlada por el EI.
La ministra del Interior, Theresa May, a la pregunta de la cadena británica ITV de si las escolares podrán de nuevo entrar en el Reino Unido, contestó que "los asuntos de este tipo se consideran de forma individual".
May señaló que algunos británicos que se unieron al EI ahora comprenden que cometieron un grave error y que la vida entre los rebeldes es muy diferente de la que se habían imaginado.
Un informe de la ONU estima que más de 25.000 extranjeros se han unido a las milicias islamistas del EI o Al Qaeda, entre ellos alrededor de 600 británicos.