"Según los resultados de 2014, solo las pérdidas de la compañía finesa Valio se cifraron en 104 millones de dólares, además el país se privó de un importante sector del mercado alimentario ruso, y en 2015 el daño puede situarse en centenares de millones de euros si las sanciones se mantienen", señaló.
Finlandia tuvo que reducir unos 6.000 puestos de trabajo, Rusia a su vez perdió unos 10.000, informó el delegado comercial.
Los círculos empresariales finlandeses dependen mucho de las señales que emiten Bruselas y el Gobierno de Finlandia, por eso se congelaron numerosos proyectos aunque existen la esperanza de reanudarlos, reveló.
El comercio ruso-finés puede disminuir un 20% al final del año por las sanciones y por una brusca caída de la solvencia tanto de empresas como de personas físicas debido a la volatilidad del rublo, dijo Sliamin y al mismo tiempo afirmó que se trata de "un fenómeno provisional".
"La economía rusa ya se ha adaptado de hecho a los nuevos desafíos, la situación se estabiliza, por lo que irá en aumento el poder adquisitivo de las empresas y de los ciudadanos de Rusia", señaló.
Finlandia figura entre los 15 socios económicos más importantes de Rusia, también juega un relevante papel como un país de tránsito, cuyo volumen anual ronda los 18.000 millones de dólares, pero este sector también se vio afectado por las sanciones, el volumen de las operaciones de tránsito puede disminuir un 10%, estiman expertos rusos.