"Admiro al pueblo ruso por el valor que tenía, por la forma en que luchó y se defendió de los alemanes, sobre todo en las condiciones de aquellos terribles inviernos y heladas. Yo estaba muy motivado con el comportamiento heroico de la Unión Soviética y su gente cuando tomé la decisión de ir a la guerra", declaró a RIA Novosti.
Relató que a la edad de 15 años se unió a un escuadrón de las fuerzas aéreas mexicanas, las Águilas Aztecas, y combatió como soldado contra las tropas japonesas cerca de Filipinas.
"En ese momento (mayo de 1945) Alemania casi se había rendido, tuvimos que acabar de vencer a Japón, y ellos no querían rendirse, preferían morir antes que ser tomados prisioneros", señaló.
Nava recalcó que conocía muy bien las condiciones durísimas en que combatió el pueblo soviético en los primeros meses de la guerra.
"Supe cómo luchó el heroico ejército soviético, que a menudo, al comienzo de la guerra, para seis o siete personas solo tenía un rifle; y cuando un combatiente era muerto, otro tomaba su arma. A pesar de todo esto, de la devastación, del hambre, su país se ha desarrollado después de la guerra, y ahora mismo Moscú es una magnífica ciudad", constató el excombatiente mexicano que hace 20 años visitó la Unión Soviética como turista.