"No tenemos la intención de dañar a Rusia, aspiramos a una amplia colaboración", dijo el diplomático a la cadena rusa RBC.
A mediados de abril el presidente ruso, Vladímir Putin, declaró que las relaciones entre Moscú y Occidente se pueden restablecer solo a condición de que se respete a Rusia y sus intereses.
A raíz de la crisis en Ucrania y, en particular, tras la adhesión de Crimea a Rusia en marzo de 2014, Estados Unidos y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú.
En respuesta, Rusia embargó por un año algunas importaciones de alimentos de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.