Según McConnell, en muchas ocasiones Kiev se ha mostrado como un cliente poco fiable.
"En este país (EEUU) nos compadecimos de la situación ucraniana en un momento cuando Ucrania estaba buscando a alguien que pagara sus facturas; como uno de los contribuyentes estadounidenses me siento molesto", comentó.
El experto destacó que hoy Europa usa el gas ruso porque estos suministros son "los más eficaces y rentables", mientras que el abastecimiento desde Estados Unidos es "poco probable", ya que exige "enormes capitales, tiempo, esfuerzos y energía".
"¿Será esto posible? Creo que con el tiempo, sí, pero es ínfima esa probabilidad", dijo a la agencia Sputnik.
Añadió que para ello se requerirían inmensas inversiones y la construcción de la infraestructura necesaria, aunque, matizó, que el gas suministrado por las tuberías siempre tiene menor costo que el gas licuado.
"Es obvio que hoy por hoy los suministros rusos son los más fiables y rentables, y es precisamente por ello que los europeos utilizan esta opción", destacó.
Además subrayó que es la ley de la oferta y la demanda con la que funciona el mercado.
Al mismo tiempo, llamó a no politizar este tema.
"Es un gran error cuando la gente empieza negociaciones políticas e intentan utilizar la cuestión energética con fines políticos", advirtió.
También Rusia expresó repetidamente su preocupación por la escasa fiabilidad de Ucrania como país de tránsito.
La semana pasada, el ministro ruso de Energía, Alexandr Novak, señaló que Rusia podría dejar de exportar su gas a Europa vía Ucrania en cuanto expire la vigencia del contrato actual, en 2019. Actualmente, el gigante energético ruso Gazprom se está centrando en la construcción de la infrastructura gasística hacia Turquía.
En la actualidad, hasta el 40% del gas ruso llega a Europa vía Ucrania.