“(Con esta visita) Argentina busca nuevos socios para resolver sus problemas económicos”, comentó el experto, mientras que “Rusia, (que) desde inicios de los 90 apoya la transición hacia un mundo multipolar, siempre buscó forjar lazos con potencias regionales en ambos hemisferios, incluyendo América del Sur, una región tradicionalmente considerada como el patio trasero de EEUU”.
“Los argentinos interpretaron esto como una expresión de resentimiento de EEUU, que tiene de por sí muchos problemas económicos propios– hacia países que se oponen a la política exterior estadounidense”, explicó Mielniczuk.
La presidenta de Argentina llegó el martes a Moscú en visita oficial, acompañada de varios ministros del Gobierno argentino.
Las partes firmaron en total una veintena de documentos, entre ellos convenios, memorandos y planes de acción en materias de desarrollo económico, social y político.
Entre los documentos suscritos destaca una declaración conjunta de ambos mandatarios sobre la cooperación estratégica bilateral y un plan de acción renovado para su desarrollo.