Según las informaciones facilitadas por el servicio de meteorología, las velocidades alcanzadas en el tornado se situaron entre los 100 y los 330 km/h, lo cual situaría al tornado como un F2 ó F3 en la escala en la que el menor tornado, un F0, tiene vientos en torno a los 65km/h y el gigante F5 alcanza los 500km/h.
Además se tiene constancia de que cinco torres del tendido eléctrico diseñadas para soportar vientos superiores a los 200 km/h fueron completamente destruidas, además de vehículos y construcciones más precarias.
El clima del interior de Santa Catarina tiene características favorables a la formación de tornados debido al intenso calor y la formación de cúmulo nimbos a gran altura, sin embargo, el radar para tornados instalado por el Gobierno brasileño en la ciudad de Lontras se encuentra fuera de funcionamiento desde el pasado enero por problemas técnicos.
Todavía este martes 74 personas permanecen ingresadas en hospitales de la región, siendo tres de ellos niños en estado grave, según confirmó este martes la Policía Militar de Xanxeré, que no descarta la aparición de nuevos fallecidos entre los escombros de las zonas más afectadas.