Un estudio del Centro Levada demuestra que los jóvenes rusos no consideran Occidente como enemigo. Sin embargo, un 44% de ellos llamaron Occidente "una civilización distinta, un mundo ajeno que tienen sus propias leyes y relaciones entre personas".
Solo un 19% dijeron que para ellos Occidente significa un grupo de países enemigos que serán siendo enemigos siempre.
Según el director del Centro Levada, los jóvenes rusos son apolíticos. Quieren buenas relaciones con Occidente a pesar de que eso contradice a la ideología de los jóvenes seguidores del presidente ruso, Vladímir Putin.