"En realidad, la OTAN está ahora en manos de los que aplican una política antirrusa, es a todas luces evidente", declaró el diplomático en una entrevista con la televisión Rossiya 24.
Todas las decisiones aprobadas por la OTAN, a juicio de Grushkó, demuestran que aprovecha el conflicto de Ucrania para "superar su propia crisis de identidad".
"Tras retirarse de Afganistán, la OTAN se ha quedado sin una faena importante… Están intentando encontrar otra aplicación", dijo.
Al mismo tiempo, indicó que algunas declaraciones de la OTAN "suenan como el reconocimiento de las malas decisiones tomadas en relación con la congelación de contactos en el ámbito militar".
La Alianza, según el embajador, desea "restablecer estos contactos y el diálogo en el ámbito militar para evitar situaciones que pueden causar una escalada".
La decisión fue tomada a raíz de la crisis en Ucrania y la reincorporación de Crimea a Rusia.
A finales de junio la Alianza Atlántica decidió prorrogar la suspensión de la cooperación práctica con Rusia ya que no había “ningún cambio en el comportamiento de Moscú” en la crisis ucraniana.