La organización humanitaria denunció "la ilegalidad del dispositivo de seguridad y vigilancia instaurado por el Instituto Nacional de Migración (INM)" en la localidad de Ixtepec, a orillas de la ruta del tren de carga apodado La Bestia, que montan los migrantes, donde el sacerdote galardonado en 2012 con el premio nacional de Derechos Humanos dirige un albergue.
Amnistía denunció un dispositivo policial de seis camiones del INM y 260 policías federales armados en las inmediaciones del Albergue Hermanos en el Camino, dirigido por el padre Solalinde, quien esa acompañado por más de 400 migrantes y sus defensores humanitarios.
AI considera que el bloqueo del INM "criminaliza a los migrantes, puesto que viola su derecho a la movilidad".
De acuerdo con el organismo con sede central en Londres, donde fue fundada en los años 60, el operativo es ilegal porque violar la Ley de Migración que "prohíbe las verificaciones migratorias en los lugares donde se encuentren migrantes albergados por organizaciones de la sociedad civil o personas que realicen actos humanitarios, de asistencia o de protección a las y los migrantes", como el albergue que dirige Solalinde.
Las personas que defienden los derechos de los migrantes ilegales que cruzan México desde Centroamérica hacia EEUU continúan sufriendo "intimidación y amenazas debido a que su trabajo es un obstáculo para quienes se benefician de la falta de acción gubernamental", puntualiza Amnistía.