Según Lukashévich, si estas declaraciones resultan ser ciertas, se les puede calificar de "absurdas, irresponsables y provocativas".
Rusia, prosiguió, "en condiciones difíciles se ocupa de la evacuación de sus ciudadanos y los ciudadanos de muchos otros países, incluidos algunos de la coalición contra los hutíes, desde Yemen".
"El ministro de Exteriores yemení, que ahora, según tenemos entendido, se encuentra fuera del país, probablemente, debería dejar de lado las fantasías peligrosas y pensar en el sufrimiento de los civiles de Yemen, centenares de los cuales han perdido la vida (en el conflicto)", dijo el portavoz de la Cancillería rusa.
Lukashévich también reiteró la propuesta rusa sobre la imposición de una "pausa humanitaria" en Yemen.
En los últimos días, los aviones rusos sacaron de Yemen a unas 600 personas, entre ciudadanos rusos y de otros países. La mayoría de los evacuados son mujeres y niños.
Desde hace más de una semana, la coalición militar de países del Golfo Pérsico y de África del Norte, liderada por Arabia Saudí, lleva a cabo una operación militar en Yemen contra los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá, que controlan la mayor parte del país árabe, incluida su capital, Saná.
La ofensiva busca restaurar al presidente Abdo Rabu Mansur Hadi y a su Gobierno derrocados por los hutíes.
Según la ONU, la operación, denominada "Tormenta de la Firmeza", ya ha causado más de 500 muertos y unos 1.700 heridos.