"Quiero decir que la dirección del sector "M" no ha presentado ningún ultimátum a los representantes de Pravy Sektor (…) la dirección del sector propuso a estas unidades definir qué formación quieren integrar, ya sea la Guardia Nacional o el Ejército de Ucrania; espero que esta situación se solucione y ellos definan con quién trabajarán", expresó Sushinski al canal de televisión 112 Ukraina.
En la víspera los medios de prensa ucranianos informaron que los directivos del sector "M" presentaron a los batallones de voluntarios el ultimátum de abandonar el pueblo de Shirókino, aledaño a Mariúpol, y retirarse de la zona de la operación especial, condición exigida específicamente al grupo radican Pravy Sektor.
Por su parte, Pravy Sektor declaró que no consideran posible el cumplimiento de la orden de retirarse de Mariúpol.
El representante oficial de la operación especial del Ejército ucraniano, Anatoli Stélmaj, declaró que todos los representantes de los batallones voluntarios pueden continuar su servicio en las Fuerzas Armadas.
"Todos aquellos que quieran continuar su servicio, están invitados al Ejército de Ucrania y permanecerán en sus posiciones", declaró durante su intervención en 112 Ukraina.
En la operación especial participan varios batallones de "voluntarios", que son financiados por diversas fuentes.
Los batallones Azov, Aydar, Donbás, Dnepr-1 y Dnepr-2 han sido financiados por el oligarca y exgobernador de la región de Dniepropetrovsk, Ígor Kolomoiski, contra el cual Rusia abrió una causa penal por el "uso de recursos y métodos de guerra prohibidos".
Pravy Sektor es la unión de las organizaciones nacionalistas radicales ucranianas.
En noviembre de 2014 el tribunal supremo de Rusia calificó esta unión radical derechista como una organización extremista y prohibió sus actividades en territorio ruso.
En enero Pravy Sektor fue incluido en el registro de organizaciones prohibidas en Rusia.