
En concreto, el pasado jueves el senador del PSDB José Serra presentó al Congreso el proyecto por el cual se cancelaría la legislación que garantiza a Petrobras la explotación de al menos el 30% de cada uno de los pozos del yacimiento del pre-sal, abriendo las puertas a la participación masiva de las petroleras Exxon, Chevron y Shell, que en la actualidad operan bajo concesión.
Un plan que, en palabras de Serra, ayudaría a Petrobras a "volver a crecer y recuperar su eficiencia" y que "libraría a la empresa de estar presente en todos los pozos, ser la operadora única de los consorcios y asumir el alto coste de las operaciones".
La propuesta del principal partido de la oposición fue presentada apenas una semana después de la multitudinaria manifestación en Sao Paulo a favor de Petrobras y después de que la empresa anunciase un volúmen récord de extracción en el pre-sal de 737.000 barriles por día.

El senador y economista José Serra, principal ideólogo e impulsor de la privatización de Petrobras, fue el candidato del PSDB a las elecciones presidenciales de 2010 en las que fue derrotado por Dilma Rousseff, y son muchos los que afirman que podría volver a presentarse para la presidencia en 2018.
Se calcula que el volumen de petróleo y gas natural acumulado en el gigantesco yacimiento del pre-sal, situado a una profundidad de entre 1.000 y 2.000 metros en torno a las bahías de Campos y Santos en el sudeste de Brasil, es equivalente a 80.000 millones de barriles, situando a Brasil como uno de los países con mayores reservas de crudo del mundo.