El abogado Ildefonso Gómez, tras la manifestación de cada jueves en la céntrica plaza del Sol de Madrid de esta asociación que denuncia la impunidad de los crímenes franquistas, explicó a Sputnik Novosti que la ley prohíbe la exaltación del nazismo y del franquismo.
El acto de principios de febrero consistió en poner un gran ramo de rosas con los colores de la bandera española sobre el campo de batalla nevado de Krasny Bor.
El acto, como recogió la web de la Hermandad de la División Azul en un vídeo, fue un homenaje a los combatientes, familiares y nostálgicos de la dictadura franquista y a los voluntarios de la División Azul que, junto al ejército nazi, fueron derrotados por las tropas soviéticas en febrero de 1943, en el cerco a la población civil de Leningrado, durante la Segunda Guerra Mundial.
El diputado republicano catalán Joan Tardà ya pidió explicaciones al Ministerio de Asuntos Exteriores, el 17 de febrero, sobre la participación del cónsul Martínez-Cattáneo en el homenaje.
Tardà preguntó si el Gobierno veía "oportuno" que el cónsul español participase en un homenaje a soldados españoles que lucharon en la División Azul "junto a los nazis en el cruel cerco de Leningrado". Y si piensa adoptar alguna medida contra Martínez-Cattáneo.
En declaraciones a RT, el cónsul afirmó el pasado 13 de febrero que su actuación había sido de carácter privado.
El padre del cónsul, fallecido en 1995, fue un teniente de Artillería que participó en la sublevación contra la República española en 1936.
Años más tarde se alistaría como voluntario en la División Azul. Militó en Falange Española Tradicionalista y de las JONS y llegó a ser Gobernador Civil y Jefe Provincial del Movimiento en León.