Se configura una "tormenta perfecta" en la cual los precios se mantendrán bajos en el largo plazo; y coincide con la celebración de contratos que le transfieran a las petroleras internacionales la mayor parte de la renta petrolera, advirtió Javier Jiménez Espriú, de Métrica Ciudadana, en un foro senatorial.
En ese caso "podríamos sufrir consecuencias económicas catastróficas que podrían cancelar nuestra viabilidad como nación", dijo el responsable del organismo de vigilancia ciudadana de la gestión pública.
En el evento con motivo de los 77 años de la expropiación de las petroleras extranjeras decretada por el presidente general Lázaro Cárdenas en 1938, expertos y senadores de oposición coincidieron en que, en un contexto de precios reducidos a la mitad del pico alcanzado a mediados de 2014, serán graves las consecuencias del tipo de contratos que se asignan a las petroleras extranjeras para la extracción de hidrocarburos.
En el foro de debate "La implementación de la reforma energética. Retos y horizonte inmediatos", Espriú manifestó que la reforma "no se está implementando en un momento oportuno, debido a la caída de los precios del petróleo, además de que existe un desbalance en los términos económicos a favor de los contratistas y en contra del Estado" mexicano.
El Gobierno de Enrique Peña, que espera al menos 21.000 millones de dólares en inversión petrolera, y hasta 62.000 millones en toda la industria, incluyendo electricidad y gasoductos, considera que la reforma es el cambio más dramático en 50 años de la economía mexicana, con impacto superior al tratado de libre comercio con Norteamérica aprobado hace dos décadas.
El Gobierno de Peña "ha apostado mucho en la reforma energética, por lo que parece adoptar una postura de celebrar contratos petroleros a toda costa, aunque ello signifique malbaratar nuestros recursos", dijo el activista del organismo civil.
A su turno, Miriam Grunstein, investigadora del Centro de Investigaciones y Docencia Económica (CIDE), dijo que el gobierno no le ha dado un papel claro a la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), lo cual "demuestra que no sabe qué hacer con un conjunto de activos y de patrimonio que son valiosos para el país"
"No veo una señal muy clara de lo que pretende este gobierno con Pemex, (…) estamos viendo una reforma donde esta empresa no juega un papel clave", apuntó.
Pemex ha tomado para sí los mejores reservorios de hidrocarburos en la Ronda Cero; pero en la Ronda Uno que está en marcha y culminará con adjudicaciones de contratos en julio de 2015 podrá asociarse con petroleras extranjeras, con un mínimo de participación nacional de 25%, que podría elevarse a 35% en diez años, dependiendo del rendimiento de las inversiones.
Carlos Torres Flores, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM, principal casa de estudios del país), consideró fundamental que "se replantee la estrategia energética del país ante la caída de los precios internacionales de hidrocarburos".
EL académico criticó los objetivos gubernamentales de acotar las capacidades de inversión de Pemex (cuyo presupuesto se ha reducido en 4.100 millones de dólares en 2015 debido a los bajos precios del crudo), sacrificar parte de la renta petrolera del Estado e incentivar la inversión extranjera para neutralizar parcialmente la rentabilidad.
La actual situación internacional impactará de manera ambigua, con pros y contras en México en sentidos contrapuestos, balanceó.
"Por un lado, el impacto será negativo, porque México es exportador de crudo; pero también positivo porque somos importadores de gasolinas y otros petroquímicos", dijo aludiendo a que el décimo productor mundial de crudo importa más de 50% de las gasolinas y refinados que consume, mientras exporta poco menos de la mitad de su producción de 2,3 millones de barriles diarios.
La senadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD, centroizquierda, tercera fuerza legislativa), Dolores Padierna, lamentó que debido al tipo de contratos aprobados con la reforma en las dos etapas de la Ronda Uno: "Pemex no tendrá beneficios y sí una enorme pérdida de renta petrolera para la nación".
La legisladora opositora considera que, "mientras a Pemex se le establece un porcentaje fijo de 70 por ciento por concepto de utilidad que le corresponde al Estado (origen de la tercera parte del presupuesto nacional), a los contratistas se les aplicará una cantidad mucho menor" de impuestos.
El líder fundador del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas (80 años), hijo del general Lázaro Cárdenas, llamó desde a tumba del hombre que nacionalizó el petróleo mexicano, en el Monumento a la Revolución, a acudir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), para revertir la reforma a la Constitución.