La nave permanecerá en Málaga hasta el 21 de marzo y a bordo se podrá apreciar una exposición dedicada a la victoria en la II Guerra Mundial.
Construido en los astilleros alemanes, este velero fue botado en 1926 con el nombre de Padua y después de 1945 pasó a pertenecer a la URSS. La bandera soviética se izó en el barco en 1946 y ese mismo año el velero fue rebautizado en honor del célebre navegante ruso Iván Kruzenstern.
Actualmente el velero pertenece a la Academia de la Flota Pesquera del Báltico, con sede en Kaliningrado.
En la expedición participan otros dos veleros, el Sedov y el Palada, junto con los cuales Kruzenstern debe transitar por mares de Europa y Asia, realizando en cada puerto exposiciones dedicadas a la II Guerra Mundial.
A finales de mayo Kruzenstern entrará nuevamente en un puerto español, esta vez en Vigo, Galicia, mientras su acompañante Sedov llevará a cabo del 23 de agosto al 10 de septiembre un viaje didáctico de Ámsterdam a Barcelona y permanecerá posteriormente tres días anclado en la capital de Cataluña.