"Es un proyecto necesario porque en México las condiciones de seguridad que puedan tener las fuentes y los periodistas son ahora muy endebles (…); muchas fuentes tienen miedo de enviar documentos o de ofrecer información", afirmó.
Destacó que "las nuevas tecnologías" usadas por los colaboradores de Mexicoleaks "permiten proteger a las fuentes".
Campa condenó asimismo el recién despido de la emisora MVS de la periodista Carmen Aristegui por haber colaborado con el proyecto.
"Rechazamos la decisión de MVS de dar por terminada la relación laboral con su equipo editorial de Carmen Aristegui; esa decisión atenta contra un espacio crítico e independiente, atenta contra la pluralidad que debe existir en toda democracia", denunció.
La popular periodista Carmen Aristegui, quien reveló a finales de 2014 la existencia de una mansión de 4 millones de dólares de la Primera Dama, Angélica Rivera, financiada por un contratista del gobierno, fue despedida por MVS por no consultar la incorporación de ese medio nacional al ambicioso proyecto anticorrupción.
Una ola de protestas sociales en los sectores opositores al gobierno de Enrique Peña, y una abierta simpatía al proyecto periodístico sorprendió a los propios fundadores, entre especulaciones de todo calibre.