"Es deseable que este conflicto entre particulares se resuelva, para que la empresa de comunicación y la periodista sigan aportando contenidos de valor a la sociedad mexicana", indica el texto sobre el despido de la experimentada e influyente periodista.
Aristegui, quien también conduce un programa de opinión en la cadena estadounidense CNN en español, fue despedida por MVS con el argumento de que la periodista y su equipo incorporaron, sin autorización ni consulta, la marca noticiosa al proyecto Mexicoleaks, creado por varios medios mexicanos para recibir filtraciones anónimas anticorrupción.
El despido ha causado una ola de protestas en medios antigubernamentales y redes sociales, incluso un mitin de unas 3.000 personas ante la estación noticiosa que transmite por radio a escala nacional y TV de internet.
Los manifestantes están convencidos de que se trata de una retaliación contra Aristegui, por haber revelado que la primera dama, Angélica Rivera, había adquirido una mansión de cuatro millones de dólares –siete millones de dólares según valuadores consultados por la periodista- financiada por un constructor y contratista del gobierno.
El gobierno del presidente Peña "ha respetado y valorado permanentemente el ejercicio crítico y profesional del periodismo, y seguirá haciéndolo con la convicción de que la pluralidad de opiniones es indispensable para el fortalecimiento de la vida democrática del país", indica el comunicado de la Presidencia.
En cambio, la periodista ha planteado que "esta batalla, no lo dude nadie, es por nuestra libertad".
El lanzamiento, la semana pasada, del portal Mexicoleaks fue inspirado en el portal Wikileaks abierto a las filtraciones de documentos e informaciones, fundado por el australiano Julian Assange, donde se han publicado miles de documentos de inteligencia de EEUU.
El nuevo proyecto mexicano reúne a un conjunto de medios independientes dedicados al periodismo de investigación, como la revista Proceso, el portal Animal Político y Periodistas de a Pie, entre otros, a los cuales se sumó Aristegui y su equipo en nombre de MVS.
Mexicoleaks ha sido presentado como "una herramienta que permite enviar información de interés público a medios y organizaciones civiles a través de tecnologías seguras que garantizan el anonimato de la fuente", para promover la transparencia y la participación ciudadana.
La respuesta de la empresa indica que "la libertad de expresión se ejerce cabalmente en MVS, tal y como ha quedado demostrado en el caso particular de Carmen Aristegui", aludiendo a las investigaciones periodísticas difundidas, y ha reiterado su compromiso con un periodismo "abierto, plural y crítico".
