Las dos empresas rusas acordaron realizar el traspaso del 20% de las acciones de Lukoil en el capital social de NNK que compañías petroleras de Rusia establecieron en octubre de 2008 para ampliar la cooperación económica con Venezuela.
Una vez cerrada la transacción, Rosneft elevará del 60% al 80% su participación en NNK, quedando el restante 20% en manos de Gazprom Neft.
El consorcio petrolero ruso tiene una participación del 40% en el yacimiento Junín 6, cuyas reservas se evalúan en 195 millones de toneladas, mientras la venezolana PDVSA controla el 60%.
Inicialmente el consorcio estaba formado por las compañías Rosneft, Lukoil, Surgutneftegaz, TNK-BP y Gazprom Neft con el 20% de participación.
Cada empresa invirtió 200 millones de dólares en el proyecto.