El cese de los directivos se produce horas después de que anoche dimitiera en bloque el consejo de administración del Banco de Madrid, su filial española.
El BPA es el tercer banco de Andorra y el primero en la historia del país pirenaico en ser intervenido.
Fundado en 1957, los activos del banco, perteneciente a la familia Cierco, fueron de 3.346 millones de dólares en 2013, pero su volumen de negocio —incluido el patrimonio gestionado- podría superar los 8.000 millones.
El ministro de Finanzas de Andorra, Jordi Cinca, ya avanzó ayer que el BPA podría ser vendido a otro grupo andorrano.
Según EEUU, el banco andorrano habría facilitado transacciones de la mafia rusa a través de Andrei Petrov, detenido por la Policía española en febrero de 2013 en la población catalana de Lloret de Mar, acusado de blanquear dinero.
Petrov estaría relacionado con Semion Mogilevich, uno de los ‘Diez Más Buscados’ del FBI, señala el comunicado hecho público hoy por el Departamento de Estado de EEUU.
En un comunicado del Departamento de Delitos Financieros y Control del Tesoro (FinCEN) de Estados Unidos, se afirmaba que el banco blanqueó fondos de la estatal de Petróleos de Venezuela (PDVSA) que alcanzaron los 2.000 millones de dólares.
Este caso, según algunas fuentes, podría haber sido el detonante de las investigaciones.
El Tesoro norteamericano denunció que la entidad andorrana también trabajó con Gao Ping a cambio de “exorbitantes” comisiones.
Gao Ping, acusado de vinculaciones con organizaciones criminales y de tráfico de seres humanos, habría contactado con BPA a través de hombres de negocios españoles.
El BPA también fue el banco que “regularizó”, a través de su filial Banco de Madrid, el dinero escondido en Andorra por el expresidente del Gobierno catalán, Jordi Pujol, y el de su familia.