"La elección acabó, hubo primera y hubo segunda vuelta. Un tercer turno de las elecciones no puede ocurrir a no ser que quieras una ruptura democrática", aseveró en la noche del lunes Rousseff, que no obstante manifestó "respeto" para cualquier tipo de protesta contra su gobierno, "siempre y cuando sea pacífica"
"No vivimos ni de lejos una crisis de las dimensiones que algunos dicen", añadió este martes la presidenta, que no obstante reconoció "la desaceleración económica del país", que achaca al hecho de "estar en la segunda etapa de la mayor crisis financiera internacional desde la gran depresión de 1929".
Para Rousseff, la investigación que el Supremo está llevando a cabo sobre el escándalo de corrupción Petrobras está siendo "amplia, libre y rigurosa".