"Es algo triste y, sin lugar a dudas, se toma en cuenta por los militares rusos y otros departamentos encargados de la seguridad del país. No podemos ignorarlo", declaró en una entrevista con RIA Novosti.
Advirtió que el ingreso de Ucrania en la Alianza puede llevar a un "cambio radical de la situación geopolítica, y no solo en Europa.
"Sería indudablemente un fortísimo golpe a toda la arquitectura de seguridad en Europa", algo de lo que son conscientes "personas sensatas en Occidente", según Soltanovski.
Al mismo tiempo, Rusia está dispuesta a dialogar con la OTAN, subrayó, a pesar de que la relación bilateral atraviesa su peor momento desde el fin de la Guerra Fría.
"No vamos a imponer la cooperación, pero no la rehuiremos en caso de que haya interés de la otra parte", aseguró el diplomático ruso.
Recordó que la Alianza congeló una serie de "importantes proyectos prácticos y de beneficio mutuo" con Rusia.
"La OTAN debe comprender que en el contexto de una total suspensión de la cooperación política y práctica sería difícil hablar de recuperar la cooperación a largo plazo sin que la otra parte de un paso" en esta dirección, resumió.