Las muertes elevan para 13 el número de policías asesinados en la región, informa Estado de Sao Paulo.
El domingo por la noche, Diego Moutinho, de 29 años, fue baleado en Nilópolis, en la región metropolitana de la Baixada Fluminense. Según la corporación, Diego estaba en un bar cuando abordó a un sospechosos armado que huyó en aquel momento para volver después junto a tres personas que dispararon contra él.
El sábado, Adson Nunes da Silva, fue asesinado a tiros en la misma región y después abandonado en la puerta de un puesto de emergencias. El domingo el sargento Marcelo Salles fue asesinado al acercarse a un coche sospechoso cuyos pasajeros respondieron con disparos y lanzando una granada.
Este lunes O Globo informa que, dada la situación crítica de violencia en las favelas de Río de Janeiro, el gobierno del Estado creará un cuerpo de élite para controlar el tráfico de armas en la región.