Los datos son alarmantes y la policía ha señalado que tienen que investigarse a fondo, especialmente el aumento de suicidios entre los jóvenes y la gente que vive en zonas de campo.
Luay Irzeiqat, portavoz de la policía palestina, ha indicado a la agencia de noticias palestina Maan que en 2014 investigó 32 suicidios, en 2013, 19 y en 2012, 8, lo que significa que entre 2012 y ahora se han cuadruplicado los suicidios.
Según la policía, 22 personas se suicidaron colgándose con cuerdas en 2014, seis saltaron al vacío desde lugares altos, dos tomaron sobredosis de pastillas, una ingirió un pesticida y la otra tomó veneno.
Entre las 32 personas que se suicidaron, 21 eran hombres y 11 mujeres, 12 estaban casados y 20 solteros. La mayoría de los casos de suicidio se han producido en pueblos —21-, ocho en ciudades y tres en campos de refugiados.
El distrito de Hebrón, en el sur de Cisjordania, es el que ha registrado un mayor índice de suicidios —9-, seguido de la zona de Nablus, en el norte, con 8 casos. Le siguen el área de belén (sur de Cisjordania) y Qalqilia (norte).
La mayor tasa de suicidios e intentos de quitarse la vida se da entre los jóvenes de 18 a 25 años —34,3%- y la más baja se produce en los mayores de 46 años, según las estadísticas de la policía palestina.
Los tres principales motivos de los suicidios en Cisjordania son problemas psicológicos y psíquicos, disputas familiares y problemas emocionales. En cuarto lugar se sitúan las cuestiones financieras, pero en mucha menor medida, según la policía.