"No tenemos medios para vigilar toda la retirada de las armas pesadas desde su inicio hasta el final, en algunos casos a los participantes de la misión les negaron el acceso a los puntos de despliegue y reubicación", dijo el portavoz de la misión especial de la OSCE en Ucrania, Michael Bociurkiw, en una entrevista al periódico ruso Kommersant.
Poco después, los milicianos de Lugansk declararon que la OSCE recibiese todos los datos sobre la retirada.
Por su parte, Bociurkiw acusó a ambos bandos del conflicto de no proporcionar datos sobre el número total y el despliegue del armamento fuera de la zona del conflicto, así como información sobre las rutas de la retirada y los puntos de reubicación, lo que obstaculiza a la OSCE para "efectuar sus funciones.
La tregua en Ucrania es frágil pero debe servir de base para proceso de paz, dice la ONU
El cese el fuego en Donbás, aunque débil, debe servir como base para la solución ulterior de la situación en la región, declaró a su vez el jefe de la misión de la ONU para derechos humanos, Armén Arutiunián.
“Aplaudimos los acuerdos recientes y el cese el fuego, pero este sigue siendo frágil, por eso hay que hacer todo lo posible para que la tregua se haga base para la solución ulterior del asunto”, dijo un evento celebrado en Kiev.
El armisticio más reciente, que entró en vigor el 15 de febrero, se cumple en general, sin embargo las partes siguen acusándose mutualmente de violarlo.
Las autoridades de Kiev iniciaron en abril del año pasado una operación militar contra los independentistas de Donbás en la que, según los últimos datos de la ONU, han perdido la vida más de 6.000 personas y más de 14.800 han resultado heridas.