"No somos responsables de la frustración de la izquierda radical griega, que prometió lo que no podía cumplir como ha quedado demostrado", señaló Rajoy en referencia al partido que gobierna Grecia.
El presidente español hizo estas declaraciones en un acto de su partido, los conservadores del Partido Popular, en Sevilla.
Tsipras aseguró ayer que había “un eje de poderes, liderado por los gobiernos de España y Portugal” que “por motivos políticos obvios, intentaron llevar al abismo las negociaciones" con el Eurogrupo.
Además, les acusó de querer “derribar” el Gobierno griego y “llevarlo a una rendición incondicional” antes de que su trabajo “comience a dar su fruto”, especialmente “antes de las elecciones en España”, añadió Tsipras.
“Buscarse un enemigo fuera es un truco que ya hemos visto muchas veces a lo largo de la historia pero eso no resuelve los problemas, sino que los agrava", señaló Rajoy.
"La única manera de ser serio es no prometer lo que sabes que no puedes cumplir", insistió el presidente español en referencia Tsipras.
Sin embargo, a pesar de estas palabras, Rajoy tampoco cumplió gran parte del programa electoral con el que ganó las elecciones de 2011.
A pesar de este cruce de acusaciones, el presidente español dejó claro que "quiere que le vaya bien al pueblo griego", y recordó el préstamo de 26.000 millones de euros que dejó España en el rescate griego.
Tsipras cree que Rajoy está preocupado por el avance de fuerzas de izquierdas, especialmente en pleno año electoral.
El auge de Podemos en España se equipara en muchas ocasiones al de Syriza en Grecia. El partido progresista español es, según todas las encuestas, el partido más votado en intención directa de voto. Sin embargo, las elecciones no se celebrarán hasta el mes de noviembre.
“El nuevo movimiento social de Podemos lidera los sondeos de opinión en España, convirtiéndose en una seria amenaza para el gobierno conservador de Mariano Rajoy”, señaló el primer ministro griego.
La guerra de acusaciones entre ambos líderes continúa abierta, y es probable que siga hasta las elecciones españolas en las que Podemos puede tener a Syriza como aliado.
Por su parte, el Gobierno portugués del conservador Pedro Passos Coelho, trasladó ayer su queja formal al Consejo Europeo y a la Comisión Europea, por considerar “falsas, inauditas e impropias de un líder europeo” las palabras de Alexis Tsipras sobre el país luso y España.