“Una de las células de la organización terrorista Oplot cometió un crimen contra sus propios ciudadanos”, declaró el jefe del SBU, Valentín Naliváichenko, precisando que la organización “recibió instrucciones, armas y dinero desde Rusia”.
Según él, la vida de las víctimas "se valoró en 10.000 dólares".
Anteriormente, Naliváichenko declaró que su ente había arrestado a once personas supuestamente implicadas en este atentado.
Una explosión que se produjo el pasado domingo en Járkov, durante una marcha conmemorativa de las protestas del Maidán, mató en el acto a dos personas y causó heridas a otras 11, dos de las cuales fallecieron más tarde en el hospital.
La organización Oplot, creada en 2010 en Ucrania, se opone a la glorificación del líder nacionalista, Stepán Bandera.