"Lo único que queremos es que nuestros intereses nacionales (…) sean tratados con el debido respeto. En cuanto esto ocurra, llegará el momento de un nuevo Renacimiento en las relaciones internacionales", dijo Peskov en una entrevista con la CNN.
Moscú adoptó una postura "comprensible, clara, firme y abierta" ante el cambio de poder en Ucrania que se produjo de forma ilegítima y por medio de la fuerza, destacó el funcionario.
"Estoy seguro de que en cuanto esta postura sea aceptada y comprendida, podremos recuperar la colaboración que tanto necesitamos todos nosotros para luchar eficazmente contra los desafíos que enfrentamos", puntualizó.
Enfatizó que Rusia no puede cruzar la "línea roja" de sus propios intereses nacionales.
El portavoz del Kremlin también lamentó las polémicas declaraciones del ministro de Defensa británico, Michael Fallon, quien afirmó con anterioridad que Rusia representa para Europa la misma amenaza que el yihadista Estado Islámico.
"Es evidente que (este tipo de declaraciones) no favorecen la colaboración entre países para garantizar la seguridad, no favorecen un futuro seguro y predecible", dijo Peskov, al subrayar que las declaraciones de Fallon "no reflejan la realidad".
Las relaciones entre Rusia y Occidente se deterioraron a raíz de la crisis en Ucrania.
EEUU, la Unión Europea y otros países occidentales impusieron sanciones contra Moscú que respondió con sus propias contramedidas.