"Presidente Obama, ordene el caos que tiene usted en la política contra Venezuela", expresó Maduro este lunes, según Noticias24.
El mandatario venezolano aconsejó a Obama tomar las riendas e imponer criterios de respeto hacia la República Bolivariana de Venezuela, "porque nuestro pueblo no va a aceptar más injerencia de su gobierno y más abuso de su embajada (…) No lo vamos a seguir permitiendo".
Maduro recalcó que su país aspira a establecer buenas relaciones con Estados Unidos.
Si esto no se logra, Obama será "tristemente" recordado en su país y en la región.
"Usted elige, presidente Obama, qué quiere –señaló el presidente–, se ha dejado meter en un callejón sin salida con Venezuela".
Según Nicolás Maduro, las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos deben ser de respeto mutuo.
Indicó que la embajada de su país en EEUU "no anda buscando militares para que derroquen a Obama".
"¡Imagínense ustedes si encontraran a un solo funcionario de Venezuela en EEUU que ande buscando derrocar a ese gobierno! ¿Qué creen que pasaría?", planteó.
En cambio, según el presidente venezolano, el gobierno norteamericano "ha tomado la decisión de concentrar todo su fuego, todo su poder para acabar con la República Bolivariana de Venezuela, destruir la Revolución y derrocar el gobierno popular y constitucional que yo presido".
"No lo ha logrado y no lo va a lograr, pero le ha hecho y le hace daño a la patria de Bolívar, a nuestro noble pueblo luchador", señaló.
El pasado de 12 de febrero el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció al mundo que su Gobierno había logrado frustrar un plan de golpe de Estado para derrocarlo.
El mandatario detalló que el complot sería ejecutado por varios políticos opositores y oficiales de la Fuerza Aérea Venezolana, algunos de ellos detenidos desde el año pasado, y que estaba financiado por funcionarios de EEUU.
Desde que asumió la presidencia de Venezuela tras ganar unas reñidas elecciones presidenciales, Nicolás Maduro ha tenido que enfrentar varias acciones violentas promovidas por sectores de la oposición que no reconocen su legitimidad.
En 2014 varias ciudades del país fueron escenario de una serie de protestas violentas conocidas como "la salida" que dejaron un saldo de 43 muertos y decenas de heridos.