Una juez del tribunal Krasnoprésnenski le encontró culpable de llamar a los moscovitas a participar en una marcha anticrisis que en aquel momento no estaba autorizada por el Ayuntamiento. El pasado 15 de febrero, Navalni fue detenido por la policía por repartir folletos en el metro moscovita.
La oposición pretendía reunir hasta 100.000 personas en el centro de Moscú el próximo1 de marzo.
El 2 de febrero los organizadores enviaron una carta oficial al alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, para informar sobre su intención de realizar la marcha. Sin embargo, las autoridades autorizaron su celebración solo en las afueras de Moscú.
Entre las exigencias figura la adopción de leyes contra el enriquecimiento ilegal de los funcionarios, la reforma judicial y la descentralización del poder así como la abolición de las contramedidas rusas y la reducción de los gastos militares para aumentar las asignaciones para sanidad y educación.Entre los que firmaron la petición está el exmagnate petrolero Mijaíl Jodorkovski.
En diciembre pasado Navalni fue condenado a 3,5 años sin cumplimiento de la pena en prisión por delitos económicos y su hermano, Oleg, a otros 3,5 años, con la diferencia de que sí tendrá que entrar en la cárcel.
El Tribunal Supremo de Moscú reafirmó el 17 de febrero prácticamente sin modificaciones la sentencia sobre el caso de los hermanos Navalni.