“Si regresa, será una desgracia para Georgia”, dijo el diputado ruso a la prensa.
Para Emelianov “es evidente que los estadounidenses quieren que vuelva al poder”.
El parlamentario considera que EEUU “quisiera contar con un radical en Georgia para presionar a Rusia no solo por el oeste con Ucrania, sino también por el sur”.
“Pienso que los actuales líderes de Georgia sacarán sus conclusiones respecto a quiénes son sus verdaderos amigos, y las relaciones con Rusia mejoren”, dijo.
Por su parte, Mijaíl Saakashvili declaró en una entrevista a la cadena de televisión Rustavi 2 que no tomará al poder mediante un golpe de Estado, sino por medio de elecciones.
“Si quisiera haber hecho un golpe de Estado, desde 2012 el poder sería nuestro… pero entregamos el poder de forma ordenada y pacíficamente”, declaró el político georgiano.
El partido Sueño Georgiano, fundado por el millonario Bidzina Ivanishvili, llegó al poder tras las elecciones parlamentarias de octubre de 2012, tras reemplazar al Movimiento Nacional Unido encabezado por Saakashvili.
El ministerio de Interior de Georgia abrió un proceso penal contra el partido del expresidente por conspiración con el objetivo de efectuar una toma de poder.
La institución gubernamental señala que el proceso incoado contra el Movimiento Nacional Unido está amparado por la Ley 315 del Código Penal del país, referida a la conspiración o rebelión con el objetivo de cambiar por la fuerza el orden constitucional del país.