En una conferencia en Tel Aviv, Lieberman aseguró que si no se ejecuta a los “terroristas, estamos llamando a que haya más y más terrorismo”.
“La lucha contra el terrorismo es el mayor desafío al que se enfrenta el mundo en el siglo XXI, también es el mayor desafío de Israel, aunque hay una gran distancia entre lo que Israel predica y lo que se hace”, ha señalado Lieberman.
“Liberar terroristas, incluidos aquellos que cometieron los ataques más horribles como los linchamientos (de dos soldados) en Ramala (Cisjordania) es el peor mensaje que se puede mandar en la guerra contra el terror”, dijo el jefe de la diplomacia israelí.
“Tenemos que enseñarles a los terroristas que estamos cambiando las direcciones, que no hay más pactos”, subrayó Lieberman.
“Lo que es importante es ya pensar como evitar una quinta ronda de enfrentamientos”, ha indicado en referencia a los comentarios que efectuó días atrás, cuando dijo que “un cuarto conflicto” en Gaza era “inevitable”.
De forma triunfante destacó en Tel Aviv que “cada operación militar tiene que acabar en una victoria decisiva, si no, estamos erosionando nuestras capacidades y nuestra posibilidad de disuadir".
“El hecho de que vayamos a un conflicto militar contra Hamás cada dos años no permite a Israel hacer planes a largo plazo, como un país normal, sobre temas de política y economía”, alertó Lieberman.