“Hay muchas preguntas a las cuales la policía no puede dar una respuesta, pero hay una que podemos dar ya y consiste en que protegeremos nuestra democracia”, dijo, citada por la agencia DPA.
Indicó que no se saben los motivos del atacante pero subrayó que hay “fuerzas que quieren dañar a Dinamarca, eliminar la libertad de expresión y la fe en la libertad”.
Thorning-Schmidt agregó que la comunidad hebrea local es parte del país y por eso calificó lo sucedido como un ataque contra Dinamarca y un acto terrorista.
Los tiroteos en Copenhague, que se produjeron en un café cultural que acogía una charla sobre la libertad de la expresión y en una sinagoga dejaron anteriormente dos muertos y cinco heridos.
Según un portavoz policial, el autor de los atentados “podría estar inspirado” en los recientes ataques en París.
A causa del ataque, las autoridades declararon máxima alerta en el país.