"Debemos dar una fuerte bienvenida al acuerdo, pero hay que entenderlo como un conjunto de propuestas que implica concesiones reales de todos los bandos", puntualiza a Sputnik Nóvosti el académico de la facultad de Política y Relaciones Internacionales de la Universidad de Kent, al sur de Inglaterrra.
El profesor, que acaba de publicar "Frontline Ukraine: Crisis in the Borderlands", su última investigación sobre el conflicto en Ucrania, mantiene una opinión crítica de la posición adoptada por el presidente Petró Poroshenko y su equipo de Gobierno tras las resoluciones de septiembre, que incluyeron una tregua que se rompió casi inmediatamente.
"A diferencia de Minsk, este acuerdo debe ir acompañado de un genuino compromiso por parte de Kiev", advierte Sakwa en comunicación con esta agencia.
El experto británico exhorta al Gobierno ucraniano a entablar una relación "con la insurgencia en el Este y negociar los términos de la autonomía para las gentes de Donetsk y Lugansk".
"Los servicios, incluidas las pensiones, necesitan ser restaurados para los residentes de Donbás, y se debe poner en marcha un proceso de reconciliación", sostiene el profesor Sakwa.
El académico reconoce que "muchas cosas pueden torcerse todavía, incluido el estatus de Debaltsevo".
No obstante, Sakwa transmite a Sputnik su "esperanza" de que esta última iniciativa, auspiciada por Rusia, Alemania y Francia, se alce en la hoja de ruta definitiva para resolver el conflicto.