"Esto se traduce en la preparación militar de los combatientes, el apoyo logístico y el transporte de los terroristas a territorio sirio", señala Ayhan.
El diputado prokurdo añade que los militantes islamistas heridos durante los enfrentamientos con las milicias peshmergas "se recuperan en hospitales turcos, particularmente en Sanliurfa y Gaziantep".
"Es un hecho reconocido que tanto en Turquía como más allá de sus fronteras, los medios de prensa han publicado fotos de los combatientes heridos en varias ocasiones y ni las mismas autoridades niegan estos hechos", amplía el político.
Ibrahim Ayhan revela que los integrantes del EI "pasan entrenamiento militar en campos destinados a los refugiados sirios en Birecik y Akcakale".
Pero además —acota- existe gran cantidad de propiedades privadas que son utilizadas con ese fin: "Tras la preparación, los terroristas aguardan su oportunidad en estas propiedades y cruzan en grupo la frontera con Siria para entablar combate con las milicias kurdas".
El político señala que el objetivo fundamental de Ankara al apoyar a los islamistas consiste en entorpecer los esfuerzos de los kurdos que luchan para lograr su autodeterminación en Siria.
"Las autoridades turcas aspiran a destruir todas las estructuras kurdas, sobre todo las formaciones cantonales en Rojava y los sanguinarios yihadistas son la mejor herramienta para este propósito".
El segundo objetivo de Ankara –reflexiona Ibrahím Ayhan– es "organizar un bloque suní en la región, que se contraponga a la unión chií de Irán, Irak, Siria y Hezbolá".
El político concluye señalando que la política del Gobierno turco no propicia la paz y la estabilidad en la región al profundizar la enemistad étnica e interconfesional.