Los sicarios pertenecen a bandas rivales de narcotraficantes, y también se enfrentaron en al menos cinco episodios importantes con fuerzas mexicanas de seguridad, en la ciudad de Matamoros, vecina de la estadounidense Brownsville, Texas; y en Reynosa, vecina de McAllen, del mismo estado de EEUU.
Los delincuentes de las bandas que en los últimos años seis años han aumentado los delitos de tráfico de drogas ilegales, personas indocumentadas, y secuestros, reaccionaron a los choques con la policía con bloqueos de arterias estratégicas, incluidos dos puentes internacionales.
Los hechos de violencia continuaron la mañana de este miércoles, cuando fueron reportados dos bloqueos más en la autopista que va de Matamoros a Reynosa, reportó el Grupo de Coordinación Tamaulipas, que coordina las operaciones de seguridad en ese estado fronterizo del norte de México.
En la entrada a la ciudad de Matamoros, policías estatales de Fuerza Tamaulipas desactivaron un artefacto explosivo en el estacionamiento de la alcaldía, presuntamente una granada que no explotó.
La Secretaría de la Defensa Nacional acordonó el área de la alcaldía de Matamoros y retiró el artefacto explosivo.
El consulado de EEUU en Matamoros reportó el martes "grandes balaceras en la carretera entre Reynosa y Matamoros. Algunas carreteras están bloqueadas", como la que conecta el puente internacional de Pharr, unos 1.000 km al norte de Ciudad de México.
La alcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar, advirtió que en zonas cercanas existen situaciones de riesgo, por lo que sugirió tomar las precauciones debidas, e informó que "las diferentes fuerzas federales de seguridad están trabajando de manera coordinada para restablecer el orden y la seguridad".
Desde la tarde del domingo se reportaron los enfrentamientos esporádicos en las ciudades de Matamoros, Valle Hermoso, Río Bravo y Reynosa, posiblemente conectados con pugnas internas entre cárteles del narcotráfico que disputan las rutas ilegales.
El más sangriento choque armado ocurrió en los municipios de Valle Hermoso y Reynosa, donde "al repeler los ataques, marinos y policías estatales abatieron a cinco de los agresores no identificados", de acuerdo con un reporte oficial emitido la víspera.