"La prisión permanente revisable, la cadena perpetua, es incompatible con la Constitución española", señala Joaquim Bosch, portavoz de la asociación.
La Carta Magna indica que la finalidad de las condenas debe ser la reinserción social y además prohíbe las penas que puedan ser inhumanas o degradantes.
Ante esta situación, los magistrados lo tienen claro. "Que una persona esté condenada eternamente es una condena de tipo inhumano y además es incompatible con la reinserción social", señala Bosch a esta agencia.
El presidente del Gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, y el líder de la oposición, el socialista, Pedro Sánchez, han firmado este lunes un pacto para luchar contra el terrorismo yihadista que aprueba la cadena perpetua para los condenados por acciones con víctimas mortales.
"Nosotros recalcamos que hay que actuar contra estos delitos", señala el portavoz de la asociación, "pero no con instrumentos contrarios a los derechos humanos y a la dignidad de las personas", añade.
Bosch destaca que en España actualmente se pueden cumplir hasta 40 años de condena, un sistema penal extremadamente severo.
Sin embargo, con las medidas aprobadas hoy cree que "se endurecerá mucho más" y "alejará a España de sus vecinos europeos en materia penal".
Con la nueva normativa, las condenas de los delitos muy graves, entre las que se contempla el terrorismo, serán revisados tras cumplir entre 25 y 35 años de prisión, pero tendrán una duración indefinida.
En ese momento se realizará un pronóstico para saber si el condenado es favorable a la reinserción social, y de no ser así, podrá continuar en prisión de por vida.