ETA lamenta igualmente que el Gobierno haya puesto en marcha "una estrategia que tiene un objetivo político concreto: mantener a los presos políticos vascos secuestrados, para que Euskal Herria continúe presa en España".
El grupo terrorista más sanguinario de la historia de España, que anunció en 2011 el cese definitivo de su actividad armada, acusa también de "tibieza" al Gobierno nacionalista vasco ante la "vulneración de derechos".
En una declaración difundida por la web de Naiz, íntegramente en euskera, ETA señala que "es hora de empezar a soltar las cadenas" de los presos y desea que Uribetxebarria Bolinaga, el preso fallecido de cáncer el pasado día 16 de enero, "sea el último al que se lleva la crueldad".
El comunicado de ETA se produce precisamente por la muerte anunciada de Bolinaga, condenado por los asesinatos de tres miembros de la Guardia Civil y por los secuestros de Julio Iglesias Zamora, padre del cantante Julio Iglesias, y de José Antonio Ortega Lara. Ortega Lara, un funcionario de prisiones, permaneció en cautiverio durante 532 días entre 1996 y 1997, el secuestro más largo de la historia de un grupo que exige la independencia del País Vasco.
Sin hacer ninguna referencia a un hipotético calendario sobre el desarme que acabaría con un conflicto que ha durado décadas, ETA estima que el Gobierno está "inventándose nuevas vías" para que los presos sigan en prisión "a toda costa".
Según ETA, Bolinaga "fue duramente torturado", luego encarcelado, y "como el resto de los presos políticos vascos" padeció la dispersión desde el primer día que ingresó en la cárcel y estuvo 15 años cumpliendo condena lejos del País Vasco.